Los pequeños tienen toda la vida por delante y les chifla imaginar qué serán cuando sean mayores. Si bien hay pequeños que tienen una inspiración clara, la mayor parte se pierden en versiones fatuas de la realidad que da gusto percibir. Muchos pequeños desean ser astronautas, como Buzz de Toy Story, y gozar volando por el espacio exterior hasta descubrir nuevos mundos.
Hay pequeñas que desearían tener alas, como la dulce y traviesa Campanilla, para poder danzar sobre la punta de sus pies como las bailarinas de ballet a las que tanto admiran. Otras, preferirían domesticar caballos salvajes, como su querida vaquera Jessy. Tanto unos como otros, se imaginan viviendo en una cabaña bajo un árbol, como David el Gnomo o bien otros personajes de la niñez.
Nutre su imaginación
Una forma más de contribuir a nutrir su imaginación, es dejando que en la decoración de su habitación existan referencias a estos gustos. Mas claro, son exageradamente variables y la criatura que el día de hoy deseaba pescar en un sosegado lago hasta localizar a Nemo, mañana deseará ser una estrella de rock.
Los cambios son un enorme aliciente para los pequeños y los vinilos de Ottoyanna dejan cambiar la decoración de la habitación del pequeño, al ritmo que van creciendo y alterando sus gustos, sin que queden marcas que dañen la estética o bien la pintura. Algo muy de agradecer por parte de los progenitores. Donald y Mickey pueden ser la inspiración de pequeños y pequeñas atletas con sus vinilos infantiles más baloncestístico, mas tal vez llegando a la adolescencia prefieran la imagen de Michael Jordan para inspirarse.
No importa la meta, importa el viaje
Es igual si el pequeño o bien pequeña no terminan siendo ingenieros conocidos, tal vez mientras que sueñan con edificar robots terminen descubriendo la maravilla de la informática, gracias a los juegos para videoconsolas. El camino que se recorre es tan esencial como la meta, que en ocasiones tiene poco que ver con lo que se pretendía en la niñez.
Soñar es el trabajo de los dioses, mas asimismo de los pequeños, conque dejemos que desarrollen su imaginación y jueguen a ser profesores dando clase en una de las pizarras de vinilo, mientras que una atenta clase compuesta por muñecos y peluches escuchan todas y cada una de las explicaciones sin interrumpir.
Gocemos de nuevo del viaje de la niñez, esta vez por medio de nuestros hijos. Un viaje aún mejor que el original efectuado y que podemos alentar con todo tipo de herramientas y consejos. Rememorar la niñez es uno de los milagros que trae consigo ser progenitores, decora con tus hijos.
La habitación de los más peques de la casa, siempre y en toda circunstancia es singular, es su cobijo, de ahí que debemos acomodarla a cada uno de ellos conforme sus gustos. En nuestra tienda online dispones de un sinnúmero de vinilos para decorar la pared de tu pequeño o bien de tu pequeña. Desde figuras infantiles hasta árboles de distintos colores. Si precisas un vinilo adaptado o bien con una medida singular no vaciles en preguntar.
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