Conforme un informe, existen más de once millones de familias que no pueden acceder a las hipotecas más asequibles del mercado debido a los ingresos que demanda la banca para contratar este préstamo. Conforme el análisis, específicamente, 8,43 millones de familias no ganan lo bastante para acceder a los préstamos que ofertan los diez grandes bancos del país, que requieren unos ingresos mínimos de 1.549,06 euros de media por mes. La situación se agudiza todavía más, en el caso de las hipotecas que aplican los intereses más económicos del mercado: para acceder a ellas, las entidades demandan unas ganancias de 2.300 euros mensuales, lo que provoca que 11,33 millones de hogares no puedan contratarlas.
Hoy, el número de hipotecas que otorga la banca, ronda las 18.000 por mes, un ochenta y cinco por ciento menos de las que se firmaron en mayo de dos mil siete (116.550), antes que estallase la crisis económica. Esto ha ido acompañado de una bajada del importe medio concedido por las entidades, con la caída de los costes de la residencia. De este modo, al paso que la hipoteca media firmada en mayo de dos mil siete era de 150.810 euros, las que se están registrando este año son por una media de 99.164 euros, una tercera parte más bajas.
El cierre del grifo crediticio ha coincidido con un agravamiento de las condiciones de los préstamos. Entre los elementos que se han estropeado está el diferencial. Este indicador ha pasado del 0,28 % que se registraba en dos mil siete al 3,22 % actual, esto es, se ha multiplicado prácticamente por ciento veintiseis.
En los últimos meses, muchas entidades han anunciado rebajas en sus diferenciales o bien han lanzado nuevas hipotecas con intereses más bajos que los aplicados hasta el momento. El inconveniente es que, aún las ofertas más asequibles del mercado, no sólo prosiguen siendo más caras que las que se ofertaban ya antes de la crisis económica (con diferenciales que van del 1,65 por ciento al 1,89 por ciento) sino, por si fuera poco, imponen elevadas demandas para poder gozar de los intereses, sobre todo en lo que se refiere a la vinculación con la entidad y a los ingresos mínimos demandados, por ello es aconsejable tener presente un comparador hipotecas para conocer la más económica.
Específicamente, solicitan que los clientes del servicio tengan unos ingresos mínimos de 2.300 euros, algo absolutamente inaccesible para más de once millones de familias en España, que se ven obligadas a decantarse por hipotecas más caras (con diferenciales que van del 1,74 % al 3%).
El negocio hipotecario prosigue sin vivir sus mejores momentos; nuevos requerimientos para otorgar los préstamos y el compás de espera en el ámbito por la contención de costes ,abonan el terreno para los que desean serle infiel a su entidad.
Todo está de cara para prosperar su hipoteca si cumple, claro, con el perfil de hipotecado que admiten las entidades para subrogar el préstamo de otra entidad mejorando las condiciones, esto es, haber pagado religiosamente las cuotas cada mes a lo largo de al menos cinco años. Entonces es el momento de conseguir un buen comparador hipotecas, que nos facilite cual es la más interesante del momento.
Hay que tomar en consideración que hemos vivido en los últimos tiempos una situación inusual, un ambiente de tipos bajo provocado por la crisis que ha dado estabilidad a quienes aguantan una hipoteca. Algo que torna a su fin. El acuerdo apunta que el euribor a 12 meses, la referencia para fijar la cuota de una hipoteca a tipo variable, alcanzará el 1,5 por ciento a finales de año, una subida suave si consideramos el último cierre de 1,415, mas subida al fin y al postre.Y si el diferencial que firmaste con tu banco en su día no es competitivo, puede ser el instante de cambiar con el propósito de que tu cuota se sostenga en niveles razonables.
Otra circunstancia que favorece el cambio de hipoteca, es la bajada de negocio en las entidades. Criterios más rigurosos para la concesión de nuevos préstamos y el compás de espera que vive el campo, todavía atenazado por la bajada de costos y una demanda indecisa, abonan el terreno para aquellas operaciones que llegan con el aval de la antigüedad.
Por último, sepas que si tu banco desea contraofertar a la entidad nueva que te ha hecho una propuesta, debes hacerlo por escrito y de forma vinculante, de tal modo que no quepa sitio después a modificaciones en las condiciones.
Esta es precisamente, una de las cuestiones que hay que estudiar de forma cuidadosa. No por ser hipotecas de subrogación, dejan de tener condiciones que en ocasiones desaconsejan serle infiel a la entidad actual. Está, por servirnos de un ejemplo, la Hipotecambias de Caja España con entre los diferenciales más atractivos del mercado, 0,25 por ciento , que solicita a cambio cumplir con una serie de requisitos, entre ellos, suscribir un plan de pensiones de la entidad. Otros productos resultan más razonables, la hipoteca de cambio de banco de OpenBank, al 0,45 por ciento , solo demanda la domiciliación de la nómina y de 3 recibos. Y la de ING, al 0,49 por ciento , demanda hipotecarse por sobre los 150.000 euros.