Un neumático, debe ser reemplazado dentro de un tiempo de entre tres a seis años. Las normas más antiguas hablaban de seis años, pero se referían únicamente al estrutcutral bienestar del neumático. Es decir, después de seis años, el neumático tiene riesgo de fracaso, pero los neumáticos modernos no fallan tanto. Es mucho más crítica su relación con la capacidad del neumático, para producir adherencia y detenerte cuando lo necesitas.
Talleres Granada
A los tres años, es un buen nivel para los países con un clima caliente en el verano. Es posible que el neumático dure unos meses adicionales, si está estacionado regularmente en la sombra. En lugares fríos, es posible mantener los neumáticos durante cuatro años, y cinco años si lo estacionas normalmente en la sombra. El envejecimiento, es la razón por la que talleres granada recomienda al conductor con un kilometraje anual bajo, elegir neumáticos blandos, ya que tendrían que sustituir los neumáticos debido al envejecimiento, y no por el desgaste de la banda de rodadura.La edad del neumático es el único dato que se cifra «en» la pared lateral, dentro de un marco redondo. En Neumaticos Cobravo nos explican como entender esta lectura, pues se ven como cuatro cifras, de pie durante una semana en el año: «2011» representa un neumático hecho en la semana 20 de 2011. «5208» es un neumático de la 52ª (última) semana de 2008. Los neumáticos viejos de los años 90, tienen tres cifras, con un signo adicional de un «delta» griego. «129 ^» – la semana 12 de ’99.
El mecanismo de Envejecimiento del neumático
Varios elementos, hacen que los neumáticos adquieran edad:
* Luz del sol : El efecto de los fotones y la UV-B provoca la radiación sequedad y pérdida de la elasticidad de la goma, sobre la pared lateral exterior. Los efectos se reducen considerablemente (pero no se eliminan) por el aparcamiento en la sombra y mediante el uso de diferentes tipos de materias, en los costados laterales de los neumáticos.
* El oxígeno y el ozono: El ozono es un isótopo pesado del oxígeno, que surge cercano a los circuitos eléctricos y en las zonas tropicales. El efecto del oxígeno siempre estará y también se encuentra en el interior del neumático.
* Los cambios de temperatura : Los cambios constantes de temperatura durante la conducción, en el seno del movimiento en relación con el sol, durante todo el año, hacen que el neumático genere calor y luego llega el enfriamiento («ciclo de calor»).
La problemática, es que el neumático está confeccionado de varios compuestos de caucho, así como una serie de capas internas de acero, caucho endurecido, poliéster y otras sustancias. El resultado es, que cada capa se expande a un ritmo distinto y se acaban separando. Otra razón es la erosión y pérdida de los antioxidantes, antiozonantes, anti-radiantes y el humo negro en el interior del neumático. Las ruedas delanteras también son afectadas por el calor del motor.
* Colar : La flexión de la rodadura de los neumáticos, hace que el caucho mientras se seca, tienda a agrietarse. El desgaste y la abrasión, se produce en la carga exterior, lateral y hacia abajo a profundizar las grietas, el contacto con objetos en la carretera, también afecta el neumático.
* Humedad: La humedad provoca inflamación de la goma, pérdida de sus ventajas elásticas y ahonda en las grietas. La sal en el aire alrededor de la mar, también produce este efecto, que se encuentra por todas partes del neumático, incluido el interior.
*Contaminantes : Los contaminantes en el aire, incluyendo monóxido de carbono, las gotas de combustible y el contacto del polvo con el neumático, destruye las moléculas, haciendo la goma blanda. El polvo y la suciedad, entran en las grietas causando el envejecimiento dejando el neumático cada vez más peligroso. Con los neumáticos almacenados o inmóviles, la tierra recibe a menudo insectoides que hacen el desgaste más grave.