Decoración vintage es un término muy sonoro y hasta atrayente y evocador que, en términos generales, muy generales, identifica la ambientación de espacios actuales, modernos, con piezas y elementos ornamentales del pasado.
Mas la decoración vintage no es un término único, está tan llena de matices, de formatos de interpretación, de forma que podríamos charlar de múltiples géneros de fórmulas de decoración vintage. De esta forma, por lo menos de 2 grandes ‘familias’.
Tenemos la que, por una parte, supone la integración de objetos viejos, tal como, viejos, en desuso, olvidados, limpios mas sin restaurar, y la que los incorpora piezas con años, arregladas para ser de nuevo utilizadas. Y, por otra parte, tenemos objetos nuevos, de estilo viejo, recreaciones diseñadas al milímetro para ser versiones actuales.
Los primeros, la decoración vintage con piezas viejas es una ambientación que va a llevar a sus amantes a acercarse al coleccionismo, a investigar las piezas de su interés, a encontrar familias de objetos y a visitar, de qué manera no, los mercados de calle, las tiendas de lo viejo, los anticuarios y las buhardillas propias y extrañas.
Representa un género de decoración y muebles vintage que, en su opción alternativa reconstructiva acerca del mismo modo al bricolage, que es utilizado como herramienta para hacer reparaciones y que puede llevar aparejado, algo realmente motivador para el apasionado de lo viejo, una investigación anterior a la intervención en la pieza.
Entonces está el otro gran apartado de la decoración vintage, el de las recreaciones de piezas de mobiliario, de cortinajes, de papeles pintados, de lámparas, alfombras y demás, que toman literalmente de las fuentes del pasado, mas son objetos producidos en serie como recreaciones tipo, escogidas para asombrar. Son objetos económicos, con buen aspecto, limpios, limpios, refulgentes, nuevos, para estar orgullosos de tenerlos…
Piensa en el beneficio, de este último género de objetos ornamentales de estilo vintage, que no te van a traer a casa polillas, carcoma y otros insectos no deseados y que, en el de ser piezas por poner un ejemplo que emplean electricidad, resultan de forma plena seguros, pues sus materiales no son los viejos latones de la decoración vintage años veinte, sino más bien las aleaciones que autoriza la normativa para operar como luminarias. Además de esto, el beneficio de poder adquirirlos en las páginas de tiendas especialistas de este estilo, con lo que puedes entrar aqui y ver un planeta de muebles y artículos de la decoración en lo vintage.
En este sentido, ¿te sentarías en un sofá con cincuenta años de empleo a cuestas? Un sofá decoración vintage años cincuenta ó sesenta. Se trata de un objeto de empleo cotidiano que no se adquiere para figurar, que hay que utilizar ¿Te sentirías verdaderamente cómodo en él? Ese es entre los sentidos de la recreación de muebles de estilo vintage, un mobiliario que solo va a pasar por una única mano, la tuya, conjuntos para estrenar, para crearles historia mas con su tradición.Los muebles vintage que pueden tener la manera de las viejas cómodas, el utensilio y la complicación de soluciones imperfectas de tecnologías superadas, mas que asimismo aportan gadgets concebidos, para usuarios acostumbrados a una comodidad del siglo veintiuno y a unas necesidades de aplicación que no pueden, ni desean ir cara atrás en el tiempo.
Nos referimos, por poner un ejemplo, a esas radios propias de una decoración vintage años cuarenta que tienen su espacio para la FM, para la alta lealtad o bien para conexiones USB y MP3.
O bien esos ventiladores de decoración vintage años cuarenta, de diseños y niquelados precisos a los originales que aportan más revoluciones que sus originales de ciento diez voltios. Es la decoración vintage más utilitarista y práctica para quiénes desean un el día de ayer en casa, mas con los usos de el día de hoy.